Cuando hablamos de los raperos del momento aparecen nombres como el de Lil Durk, Lil Baby o Roddy Ricch, quienes sin duda se encuentran en lo más alto de la escena Hip-Hop y su peso comienza a sentirse en la industria pop, logrando generar gran fama mediática e interés en ellos.
Sin embargo existe un nombre que también es muy grande en el rap actual, YoungBoy Never Broke Again, pero a diferencia de los mencionados al inicio, YoungBoy no logra llegar a la escena pop y se encuentra en un limbo sobre a donde llevar su carrera.
Los números de Kentrell son muy grandes, durante 2020 fue el artista urbano con más reproducciones en YouTube, superando a monstruos como Drake, Bad Bunny y The Weeknd; sus ventas son tan grandes que en un lapso de 12 meses consiguió tres álbumes #1 y también supero a leyendas como Eminem en ventas, ¿increíble no? Lamentablemente aunque sea algo muy increíble y un logro enorme, esto no le ha bastado lo suficiente para conseguir lo que artistas como Lil Baby o DaBaby han logrado: el interés de la industria pop.
¿Cual es el problema de YoungBoy que le niega su entrada a un nivel más grande? Es una sola razón, la respuesta es sus controversias. Musicalmente YoungBoy no es distinto a otros raperos que están en la cima, su lírica aunque si está llena de violencia y es agresiva no es una causal de que se le bloquee de medios ya que si así lo fuera, Lil Durk se encontraría vetado de todos lados; el problema de Kentrell es su vida privada.
Es muy probable que ya hayas escuchado sobre NBA, más que por su música por sus problemas: constantes detenciones por delitos como portación de armas ilícitas o drogas, problemas con otros raperos como King Von, problemas con sus parejas como la pelea entre la hija de Floyd Mayweather Jr. (madre de uno de los 7 bebés de YoungBoy) con otra de las parejas del rapero y la lista sigue y sigue, estos son problemas en los que estuvo involucrado sólo en 2020, su carrera se encuentra en auge desde su breakout hit en 2017, GG.
Estos problemas para muchos no significarán motivos que no le permitan llegar a un público más amplio ya que, tristemente, la imagen de un rapero problemático es amada por los medios americanos, la diferencia es que YoungBoy está en todo lo que no es permitido en medios actuales, sus problemas pueden ser equiparables a cuando distintos medios prohibieron a Tory Lanez en sus sitios después del conflicto con Megan Thee Stallion, NBA se encuentra en ese tipo de posiciones.
Debido a su actitud y persona, Kentrell suele ser alguien difícil de digerir y es constantemente criticado, citando una frase icónica de Menace II Society, el rapero de 21 años es todo lo que incomoda en Estados Unidos: joven, afroamericano y sin importarle nada, es por eso que constantemente al hablar en entrevistas o en sus livestreams, suele decir cosas que muchas personas no toman a buen ver y eso ha llegado al punto de ser alguien que con su simple nombre sea repudiado por un público ajeno a la cultura Hip-Hop, quienes no frecuentan ver a artistas hablar de ciertos tópicos ni a comportarse de maneras tan agresivas.
Musicalmente el oriundo de Baton Rouge no tiene nada de que preocuparse, es de los pocos artistas que logran brindar mucha cantidad y calidad en sus trabajos y es por ello que sus seguidores son de los más fieles en la escena y es algo que le ayuda mantenerse a flote, pero si quiere aspirar a cosas más grandes debe cambiar muchas cosas de el.
Young Thug dio cierta perspectiva sobre esto, mencionó que para llegar a un nivel aún más grande fuera del rap, se debía de ir a otros géneros y analizando esto, no solo se trata de la música sino la imagen, artistas como Drake, Travis Scott, Playboi Carti e inclusive el propio Young Thug han tenido que cambiar algunas actitudes personales para ser del agrado de un público ajeno al que acostumbran.
El intérprete de Kacey Talk es alguien que tiene un potencial aun más grande que el de algunos artistas que hoy se encuentran en todos lados, su único problema es su falta de visión y madurez para reconocer en qué punto se encuentra su carrera y todas las oportunidades que tiene en la palma de su mano pero decide dejarlas ir.